Una casa en Castellón renovada con mimo y todo lujo de detalles
En la reforma integral de esta vivienda se ha puesto especial empeño en respetar y rescatar sus elementos originales.
“Queríamos una casa con encanto y para rehabilitar donde crear algo moderno desde cero”, cuenta la propietaria, Lucía Chover. Ella y su pareja, Santiago Martín, fundadores del estudio Vitale, han tardado años en encontrar este edificio de vigas macizas, muros de ladrillo visto y carpinterías de madera. “La casa es de 1947 y el promotor fue un poeta castellonense, Bernat Artola, que quiso hacer una casa a la antigua usanza pero con algunos elementos modernos para aquella época. Es un edificio muy cuidado en lo estético y lo constructivo”, afirma Chover.
La pareja restauró vigas, ventanas, puertas… Se convirtieron en “expertos en rehabilitación”, recuerdan entre risas, aunque reconocen que tuvieron “mucha ayuda porque para recuperar bien los objetos hay que saber cómo hacerlo; entenderlos bien para respetarlos. Siempre es más fácil y cómodo comprar algo nuevo. Las reformas son crueles en los números y el esfuerzo, pero te devuelven lo invertido por triplicado”, dice Martín.
ANTES: el vestíbulo era un pequeño distribuidor oscuro con techos muy altos.
ANTES: el vestíbulo era un pequeño distribuidor oscuro con techos muy altos.
DESPUÉS: ahora, la entrada se abre al resto de la casa. En esta parte, los techos se han rebajado para mejorar las proporciones y se ha generado un gran armario a medida de roble, cuyo precio ha sido de 1.700 € (IVA no incluido), y que esconde además el lavabo de cortesía. “Queríamos una entrada lo más amplia posible y que no fuera un mero hall sin utilidad”, dice Martín.
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ANTES: como se ve en el plano, la vivienda estaba muy compartimentada. “Tenía cuatro habitaciones y varias daban a un patio de luces oscuro”, cuenta Martín.
Además, “como los techos son muy altos (3,50 m) los dormitorios resultaban angostos”, añade Chover. Con esta altura es imprescindible tener espacios abiertos para que las proporciones estén equilibradas.
Además, “como los techos son muy altos (3,50 m) los dormitorios resultaban angostos”, añade Chover. Con esta altura es imprescindible tener espacios abiertos para que las proporciones estén equilibradas.
DESPUÉS: se ha diseñado una gran cocina y se han abierto las estancias. “Lo más importante fue trabajar muy bien la zona de día y la de noche. La fachada a la calle la dedicamos a la zona de noche y la interior, con acceso al patio, a la de día y la cocina”, continúa Chover.
Además de dejar espacios abiertos para ganar luminosidad, se han acometido pequeñas intervenciones, como abrir una ventana en la cocina hacia la zona de la biblioteca. Esto solo costó 400 €, ya que la ventana la restauramos los propios dueños.
Además de dejar espacios abiertos para ganar luminosidad, se han acometido pequeñas intervenciones, como abrir una ventana en la cocina hacia la zona de la biblioteca. Esto solo costó 400 €, ya que la ventana la restauramos los propios dueños.
El salón es un espacio abierto. La pareja ha conservado la ventana original que comunica la cocina con el salón.
El mueble de la tele es “la pieza más peculiar de la casa –afirma el propietario. Necesitábamos un elemento para ocultar los cables, pero que le diera también altura para rebajar la sensación de techos altos”. Tras darle muchas vueltas optaron por un mueble suspendido hasta el techo con una rejilla de mimbre en la parte de atrás. El mimbre es un elemento que se repite en otros lugares de la casa y que conecta con su espíritu antiguo. El mueble es a medida y costó 550 € (IVA no incluido)
El mueble de la tele es “la pieza más peculiar de la casa –afirma el propietario. Necesitábamos un elemento para ocultar los cables, pero que le diera también altura para rebajar la sensación de techos altos”. Tras darle muchas vueltas optaron por un mueble suspendido hasta el techo con una rejilla de mimbre en la parte de atrás. El mimbre es un elemento que se repite en otros lugares de la casa y que conecta con su espíritu antiguo. El mueble es a medida y costó 550 € (IVA no incluido)
Detrás de la tele hay una pequeña zona de lectura y el acceso al baño de cortesía, cuyo suelo es “una baldosa hidráulica que compramos en Jerez y se hace artesanalmente en Marruecos”, cuenta Chover.
Las baldosas tienen un tratamiento especial para cerrar el poro y evitar las manchas porque “es un material delicado y ha sido uno de esos caprichos ‘controlados’ que nos hemos dado para la casa”. En el resto del pavimento se han invertido 2.400 € (IVA no incluido) en un cemento fratasado.
Las baldosas tienen un tratamiento especial para cerrar el poro y evitar las manchas porque “es un material delicado y ha sido uno de esos caprichos ‘controlados’ que nos hemos dado para la casa”. En el resto del pavimento se han invertido 2.400 € (IVA no incluido) en un cemento fratasado.
En el baño de cortesía, como en toda la vivienda, se ha usado la misma colección cerámica pero en diferentes colores y colocaciones. “Este tipo de baldosa representa la esencia de la cerámica: pequeño formato, destonificada, con una superficie ligeramente ondulada…”, explica Martín. El inodoro suspendido y los lavabos son el modelo Semplice, de NIC.
Al elegir la calefacción, los dueños han tenido en cuenta el estilo de la casa. “En un espacio así, lo más difícil es encontrar cosas que no desentonen”. Finalmente, se decantaron por un diseño un tanto retro, en lugar de radiadores modernos. Esto supuso un incremento de 900 € en el presupuesto, pero se evitó tener que ocultarlos con algún elemento decorativo.
“Cuando compramos la casa no sabíamos que también había paredes de ladrillo porque hicimos la cata en una pared que era de piedra. Creyendo que esta también era de piedra, estuvimos pensando qué hacer con ella para que no quedara sosa. Durante la obra vimos que había ladrillo y lo dejamos a la vista. ¡Fue un gran regalo!”, dice Chover.
Sofá amarillo: Sancal
Sofá amarillo: Sancal
ANTES: la cocina era muy pequeña y estrecha y estaba separada de la zona de comedor.
DESPUÉS: Se han unido dos espacios para crear una gran cocina de 20 metros cuadrados. “El almacenaje era fundamental. Queríamos que en la nueva cocina cupiera todo lo que ya había en la de nuestra casa anterior”, cuenta Martín.
Chover cuenta que conseguir este resultado ajustándose al presupuesto ha supuesto “sacrificar algunas cosas para poder tener las que realmente son importantes”. Por ejemplo toda la cocina es de IKEA, “pero la hemos tuneado con una encimera de granito natural apomazado y una salida de humos decorativa con tubos de chimenea”.
Concretamente, la cocina es la serie Metod, de IKEA, con frentes Bodarp en tono gris (2.300 €). La encimera de Nero Infinito de Granith (900 € con montaje incluido) y el fregadero Norte, de Interbany (290 €).
Chover cuenta que conseguir este resultado ajustándose al presupuesto ha supuesto “sacrificar algunas cosas para poder tener las que realmente son importantes”. Por ejemplo toda la cocina es de IKEA, “pero la hemos tuneado con una encimera de granito natural apomazado y una salida de humos decorativa con tubos de chimenea”.
Concretamente, la cocina es la serie Metod, de IKEA, con frentes Bodarp en tono gris (2.300 €). La encimera de Nero Infinito de Granith (900 € con montaje incluido) y el fregadero Norte, de Interbany (290 €).
La mesa de la cocina la diseñaron a medida. “La inspiración son las mesas de trabajo de carpinteros –dice Chover. La altura de la mesa es de 90 cm, igual que la encimera de la cocina. Así, sirve de mesa de refuerzo cuando estás cocinando”, explica Martín. En la parte inferior cuenta con varios enchufes para conectar el portátil y poder trabajar.
Taburetes modelo Cap, un diseño de Ximo Roca para Mobboli.
Taburetes modelo Cap, un diseño de Ximo Roca para Mobboli.
ANTES: la cocina comunica con un patio interior con trastero que no aprovechaba todo su potencial.
Visita privada: 27 metros cuadrados muy acogedores en el centro de Madrid
Visita privada: 27 metros cuadrados muy acogedores en el centro de Madrid
DESPUÉS: los propietarios han cambiado el suelo y han agrandado el trastero, que también se usa ahora como zona de lavandería.
“Nos encanta recibir gente en casa y queríamos una habitación de invitados en la que cupieran cuatro personas cómodamente –cuenta Chover. Acordándonos de nuestros viajes por Europa y de dormir en sitios tipo mezzanino dimos con esta solución con una cama arriba y otra plegable debajo”.
Para las escaleras era necesaria una solución económica, estética e higiénica al tiempo, ya que al subir y bajar se mancharían las paredes. “Nos decantamos por piezas cerámicas de pequeño formato y destonificadas en colores planos”.
Para las escaleras era necesaria una solución económica, estética e higiénica al tiempo, ya que al subir y bajar se mancharían las paredes. “Nos decantamos por piezas cerámicas de pequeño formato y destonificadas en colores planos”.
Para evitar el efecto tubo por la altura del techo se ha dejado la habitación abierta. Una cortina corredera permite independizarla si es necesario. En este espacio se han invertido en total 3.100 € (IVA no incluido),
ANTES: en la fachada principal se encontraba el salón-comedor.
DESPUÉS: Ahora está el dormitorio principal. Destaca la pared del cabecero, hecha cerámica y retroiluminada. “En la casa apenas hay lámparas de techo –dice Martín. Queríamos replicar la luz natural, que no es tan cenital como la que proyectan las lámparas de techo”.
El propietario opina que la pared de cerámica aporta presencia al cabecero de madera, “que en otras casas puede parecer grande, pero aquí se quedaba pequeño por la altura de los techos”.
El armario a medida del dormitorio ha costado 1.500 € (IVA no incluido), destacando las puertas metálicas a medida (575 €); la guía corredera Klein (220 €), y vidrios acanalados (200 €).
El propietario opina que la pared de cerámica aporta presencia al cabecero de madera, “que en otras casas puede parecer grande, pero aquí se quedaba pequeño por la altura de los techos”.
El armario a medida del dormitorio ha costado 1.500 € (IVA no incluido), destacando las puertas metálicas a medida (575 €); la guía corredera Klein (220 €), y vidrios acanalados (200 €).
El baño en suite debía ser exterior. “Hemos vivido en muchas casas y todos tenían baños interiores. Tener un baño exterior era uno de nuestros caprichos”, reconoce Chover. Todo el mueble está hecho a medida. El lavabo de mármol Carrara blanco ha costado 920 € (IVA no incluido) y el mueble 740 € (IVA no incluido).
En la zona de ducha e inodoro se ha diseñado un gran armario de almacenaje con frontales espejados para generar sensación de amplitud. Además, “pusimos junta de epoxy, especial para zonas húmedas, y en color negro para evitar los problemas de envejecimiento y suciedad en las juntas”, explica Chover.
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Quién vive aquí: Lucía Chover y Santiago Martín, fundadores del estudio Vitale
Situación: Castellón
Superficie: 79 metros cuadrados + 29 metros de terraza exterior con trastero-lavadero
Proyecto: Vitale
Presupuesto: 93.000 € (IVA no incluido). Solo la reforma integral costó 58.000 € (derribo, rehabilitación de pavimento, tabiques de pladur, recubrimientos, ventanas, fontanería, electricidad, etc.). El resto del presupuesto se ha destinado a mobiliario, electrodomésticos, iluminación y sanitarios
Fotografía: Ana Ferrero / ©Houzz España 2022
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